
Venecia, en Italia, es una de las ciudades más pintorescas y mágicas del mundo, además de que siempre solemos relacionarla con alguna de nuestras escapadas románticas, quizá por ese ambiente tan especial que se respira desde el primer momento en que pisamos sus antiguas calles y sus hermosas plazas. Esta ciudad italiana se divide en seis distritos administrativos llamados sestieri. Éstos son: San Marco, Castello, Santa Croce, Cannaregio, San Polo y Dorsoduro.
Lo primero que suele llamarnos la atención cuando llegamos a Venecia son sus canales, equivalentes a las carreteras y calles de cualquier otra ciudad del mundo. Un total de 411 puentes y 150 canales atraviesan la ciudad, incluyendo el mundialmente famoso Gran Canal, una enorme vía fluvial con 3.800 metros de largo. La ciudad cuenta también con 118 islas pequeñas, que son la base donde se mueven los millones de turistas de todo el mundo que la visitan. Aunque los canales son navegados utilizando los vaporettos, que son una especie de autobuses acuáticos asequibles para todos, muchos turistas utilizan las románticas góndolas para sus trayectos. Estas góndolas son un transporte caro, por supuesto, aunque siempre resulta tentador utilizarlas al menos una vez durante nuestra estancia en la ciudad, sobre todo si vamos acopañados de nuestra pareja en una escapada romántica.
Las góndolas son la marca de Venecia. Es el símbolo que utiliza la ciudad con el resto del mundo. Esta embarcación tiene once metros de largo y pesa unos 600 kilos. Aún así puede ser maniobrada cómodamente con un solo remo y por una sola persona, llamada gondolero. La góndola tiene un tipo de construcción muy particular y asimétrica, lo que le permite ir inclinada a veces hacia un lado mientras está en movimiento. Su fondo es plano, lo que hace que pueda navegar incluso con pocos centímetros de profundidad del agua. Sigue leyendo →